Los grandes emprendedores y líderes del mundo, personas como Elon Musk, Bill Gates, Jeff Bezos o Mark Zuckerberg, tienen algo en común. Ellos siguen una rutina fielmente cada día de sus vidas. Su rutina los anima, los empodera y los guía hacia un mayor desarrollo y niveles más altos de éxito cada día.
De manera que si queremos obtener grandes resultados nosotros mismos, una buena estrategia podría ser el ejemplo y las rutinas de los grandes líderes del mundo.
¿Cuál es esta rutina?
Hay varios pasos que estos grandes líderes siguen en su día a día. Veamos cuáles son:
Los grandes líderes no son personas que se queden dando vueltas en la cama en las mañanas. Ellos son proactivos y no dejan que los sentimientos de pereza, tristeza o depresión los dominen. Al ver el sol, ellos toman la iniciativa de moverse fuera de sus dormitorios y establecer planes de acción concretos para sus vidas.
Hay muchas razones para agradecer. Sea que tengas creencias religiosas o no, todos podemos manifestar nuestro agradecimiento. Podemos agradecer a Dios, al universo o a la vida, el hecho de que tengamos desafíos para enfrentar y nuevas oportunidades para hacer las cosas mucho mejor que lo que hicimos durante el día anterior. Esta característica de los grandes emprendedores los pone en una sintonía nueva para lograr sus metas y propósitos.
Este pequeño hábito es un pequeño logro para el nuevo día y nos enseña disciplina y atención a los detalles. Con esto establecemos el primer escalón para hacer cosas nuevas y mejores durante todo el día. Esta es nuestra primera gran victoria. Así que, si quieres tener éxito, tienes que salir pronto de la cama y dejarla lista y ordenada.
Los grandes líderes y emprendedores saben que el movimiento es importante. El ejercicio libera endorfinas y mejora nuestro estado de ánimo. Con solo 20 minutos de ejercicio al día, podremos cambiar nuestro estado de ánimo para toda la jornada y comenzaremos a ver las cosas con una perspectiva diferente. Adicionalmente, esto nos ayudará a tener más energía para el resto de la jornada.
La ducha fría es algo a lo que le temen muchas personas. Pero cuando tomamos una ducha fría no nos estamos dejando vencer por el miedo al frío, lo estamos superando. Tomar una ducha fría nos ayuda a superar miedos y disponernos con un ánimo mucho más despierto para todo lo que nos prepara el nuevo día.
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